Con las nuevas elecciones del 2025 ha surgido un nuevo caudillismo político su nombre es Daniel Noboa Azin, joven político que ha puesto en aprieto a los tradicionales partidos y movimientos políticos en Ecuador; ADN y RC son los únicos movimientos políticos que mantienen liderazgo en las preferencias populares, cuya ciudadanía así lo ha aceptado.
Los tradicionales partidos políticos incluida las viejas y obsoletas costumbres del quehacer político han perdido sus agendas por haber cambiado de rumbo donde se encuentran inmiscuido en escándalos tras escándalos como son los casos de Metástasis, Purga, etc. y de remate, como si el gran electorado fuera siego y sordo trataron de introducir alternativas de candidatos con ciudadanos y ciudadanas desconocidas en sus respectivas jurisdicciones, tan solo por la soberbia de tener un liderazgo equivocado.
Los tradicionales partidos y movimiento políticos como el PSC y otros, sus dirigentes, llámense líderes como es el caso del Ab. Jaime Nebot, debe corregir sus errores y reconocer que la prepotencia política ha hecho daño a las bases que no son oídas.
El PSC ha sufrido una considerable caída tanto en las candidaturas presidencial como en asambleístas provincial y nacional; el respaldo popular recibido en las elecciones del 2025 a caído al 3.15%. Derrota que ha cobrado factura desde que el Abg. Jaime Nebot dejó la alcaldía de Guayaquil.
Los partidos y movimientos políticos tradicionales que han perdido respaldo popular entre ellos, el caso del PSC, caminan a una debacle partidista sino corrigen y actualizan la agenda política estructurando nuevo modelo político donde las bases tenga la oportunidad de ser parte en esta agenda.
El PSC a nivel nacional tiene dirigencia probada, en el caso de la provincia de El Oro, existen valiosas mujeres y hombres que han demostrado sobrado conocimiento de cómo llegar al gran electorado orense con estructuras barriales y cantonales, como son: Lcda. Patricia Enríquez de Ugarte, Zoila Ollagüe de Bravo, Rosa María Loayza, Guillermo Serrano, José Ugarte, entre otros, probos dirigentes que han estado en las buenas y en las malas del PSC.
Haciendo una revisión de la coyuntura política, económica y social en Ecuador desde el 2006 la fecha, ha tenido especial énfasis en los resultados electorales para el PSC, hoy desplazado por fuerzas políticas con nuevo caudillismo, todo por mantener candidatos outsiders.
Desde su retorno a la democracia en 1979, el Ecuador ha vivido períodos de democracia ininterrumpido que se caracterizó por una creciente inestabilidad política que ha llevó a la destitución en seguidilla de tres presidentes popularmente electos. La democracia ha peligrado en los tres últimos periodos de gobierno de Moreno, Lasso y lo que va del gobierno de turno, la democracia a punto de romperse con actores de la Asamblea Nacional que han tratado de negociar el retorno del prófugo de la justicia.
Este desencanto popular ha sido capitalizado por movimientos políticos con candidatos de alquiler a la presidencia de la República, resurgiendo nueva agrupación política como el ADN que virtualmente ha desplazado a los partidos políticos tradicionales.