Pablo Andrés Vargas Casco, de 31 años de edad, no imaginó que su última copa sería con su ex, porque sería quien lo liquidaría, la madrugada del día martes 6 de mayo, en pleno festejo de cumpleaños en una vivienda ubicado en el cantón La Troncal, el hombre terminó con una puñalada en el pecho tras una riña sentimental con su antigua pareja, de 22 años de edad.
De acuerdo a la versión a la versión de familiares, el hecho ocurrió luego de una discusión por una cajetilla de cigarrillos. Una de las personas presentes en el lugar habría indicado a la policía que, la mujer habría apropiado de un cuchillo y entre amenazas, el occiso le retó a que lo apuñale. Dicho y hecho. Tras el ataque, la agresora intentó auxiliarlo acostándolo en un colchón, creyendo que la herida no era mortal.
Horas después, al ver que no despertaba, llamaron al Sistema Integrado de Seguridad ECU-911, pero ya era tarde, estaba muerto. La sospechosa huyó antes de que llegaran las autoridades.
