Trabajadores de la finca Mayra 2 , ubicada en el cantón Naranjal, vivieron momentos de angustia cuando sujetos armados, presuntamente vinculados a un Grupo Delictivo Organizado (GDO), irrumpieron en el lugar y realizaron varios disparos al aire. El incidente dejó a los empleados conmocionados y en alerta ante la creciente inseguridad en la zona.
El ataque ocurrió el martes 10 de diciembre, a las 09:32, mientras los trabajadores realizaban labores de procesamiento de banano para su exportación. Según lo captado por cámaras de seguridad, tres hombres llegaron al sitio a bordo de una motocicleta. Dos de ellos descendieron y se dirigieron hacia los empleados, efectuando los primeros dos disparos en medio de la jornada laboral.
Un minuto después, los atacantes volvieron a disparar, aumentando el pánico entre los trabajadores. Tras sembrar el terror, los sujetos se retiraron rápidamente, dejando a los empleados en un estado de shock. Aunque no se reportaron heridos, el suceso reavivó la preocupación por la creciente actividad delictiva en las zonas agrícolas.
Las primeras indagaciones apuntan a que los individuos estarían vinculados a un grupo criminal que opera desde la Cárcel Regional del Litoral. Este GDO tendría influencia en sectores estratégicos como Santa Rosa de Flandes y Puerto Salvador, donde estarían involucrados en actividades de extorsión y amenazas sistemáticas a los productores locales.
La Policía Nacional ya ha iniciado las investigaciones para identificar y capturar a los responsables del ataque. Según fuentes cercanas al caso, no se descarta que el incidente esté relacionado con intentos de extorsión hacia los propietarios de la finca o actos de intimidación dirigidos a la comunidad.
Los moradores de las áreas afectadas señalan que este no es un hecho aislado. Durante los últimos meses, la presencia de grupos delictivos organizados ha incrementado la inseguridad, afectando gravemente la actividad agrícola y el comercio en la zona.
