Ecuador está viviendo la nueva era de las componendas políticas o más bien conocida como los “chanchullos” de acuerdos secretos para obtener beneficios de forma poco clara a espaldas del pueblo ecuatoriano.
Estos chanchullos y/o acuerdos de la componenda política es una estrategia ya conocida entre la partidocracia moderna ante la impotencia de la sociedad que mira para otro lado porque no sabe a donde mirar.
El gobierno de los 10 meses de Daniel Noboa está viviendo este infiernillo lleno de crisis donde los “comensales” de la Asamblea Nacional hacen de la componenda política un baratillo del voto para saciar sus caprichos políticos en busca de la tan ansiada impunidad para el mandamás del grupo; luego de haber fracasado con los votos del juicio político de la ministra del interior, estos fracasados se vuelven a unirse entre el agua y el aceite para la elección de la primera vicepresidencia de la Asamblea Nacional e insofacto, se aprueba una terna para reemplazar a jueces de la Corte Constitucional.
El cirquillo barato de las componendas de la política llamado el “tira y jala”, es la razón por la cual nuestra débil democracia está en el filo del barranco y en cualquier momento se estaría avizorando un levantamiento “antisocial” al estilo del incendiario y otros que no les calificaron sus listas para asambleístas nacionales.
Mientras esto sucede en la Asamblea Nacional y en el CNE, hay otros protagonistas de la política que han despertado luego de haber estado escondidos desde el gobierno del prófugo de la justicia que gobernó desde el 2007 al 2017, quién hiso y deshizo vendiendo el patrimonio nacional a los chinos tanto del petróleo como de las construcciones de las hidroeléctricas en sobreprecios, no dijeron esta boca es mía. Hoy, vociferan expresando que habían advertido de estas futuras desgracia como es la crisis eléctrica. Cuando en la realidad, es una sequia que la Madre Naturaleza está cobrando factura por la indolencia humana de aquellos políticos que se robaron los recursos económicos del Estado ecuatoriano.
Estos “valientes políticos” que denuncian mentiras son los verdadero “caras de tuco” que está pidiendo el voto para llegar a la presidencia de la República y a la Asamblea Nacional, engañando nuevamente al pueblo dando declaraciones que cuando llegan al poder todo lo resolverán.
Es indolente escuchar frases de unos cuantos llamados técnicos eléctricos y otros magos de oficio, quienes, muy descaradamente manifiestan que el país está en la deriva y que el presidente de turno no ha dado mantenimiento a las hidroeléctricas por cuanto no se ha nombrado un profesional del ramo. Estas declaraciones son injustas por cuanto estos mismos profesionales jamás llamaron a rueda de prensa para denunciar a los responsables de las crisis eléctricas.
En conclusión, mientras que el expresidente Correa pide a México que invadan al Ecuador y al Puerto de Guayaquil, por la detención de Jorge Glas, la Asamblea Nacional se hicieron los sordos, ciegos y mudos … Este caso y otros son las razones para desterrar las componendas políticas.