Quienes me conocen, saben que no soy periodista, que solamente hago uso de mi derecho constitucional del Art. 66 numeral 6 que dice: “Se reconoce y garantizará a las personas: El derecho a opinar y expresar su pensamiento libremente y en todas sus formas y manifestaciones”; y, de la generosidad de propietarios o representante de ciertos medios de comunicación, que me otorgan un espacio para hacerlo.
Siempre he manifestado mi humilde reconocimiento a quienes hacen y se dan la responsabilidad de hacer periodismo de investigación, como: Emilio Palacio, Cristian Zurita, Hernán Pérez Loose, Janeth Hinostroza, Fernando Villavicencio (+), entre otros, que ofrendó su vida en combate contra la corrupción ecuatoriana.
El periodista Hernán Pérez Loose, en su cuenta X, publica un artículo que lo titula: “Nuevamente Los Marcianos”, del mismo que, por considerarlo excelente, voy a transcribir ciertas partes:
“El Partido Social Cristiano, lejos de admitir su grave responsabilidad jurídica y política en el tramado de corrupción que se ha develado, y de entrar en un proceso de reflexión y cambio radical, ha optado por hacer el ridículo. Pretenden que el País les crea que lo que sucedía en la casa de uno de sus jerarcas en la Isla Mocolí, no mera de su conocimiento, que el atraco fallido al Banco del Pacífico, el robo descarado de tierra, y los vínculos con el narcotráfico, todo ello mes un asunto simplemente ‘privado’. ¿Tan imbéciles creen que somos los ecuatorianos para decirnos semejante payasada? ¿Recitarán ese mismo libreto cuando sean llamados ante los jueces competentes -algo que parece inevitable- que están conociendo precisamente delitos de delincuencia organizada?
Las revelaciones que se han hecho, y que parecen la punta de un iceberg, van confirmando una realidad, en que se ha minado por completo al sistema judicial, algo que también ha beneficiado a los carteles.
Va quedando en claro la confluencia de fuerzas en el derrocamiento del anterior gobierno. Los narcos, hasta llegaron a financiar la campaña por el NO de la anterior Consulta; y, lo mas grave, va quedando en claro el origen intelectual del asesinato de Fernando Villavicencio, cuando era candidato a la Presidencia.
Es la primera vez que semejante tramado delictivo ha salido a la luz pública, en el contexto de una investigación criminal. Ya no se trata de atar cabos en base a hechos mas o menos comprobables, o de especulaciones de ‘periodistas asalariados’. Lo que tenemos hoy son: Testimonios, declaraciones, fotografías, mensajes, conversaciones debidamente registradas; todo ello bajo la responsabilidad de una ecuatoriana seria y valiente.
Por eso la campaña de difamación contra la fiscal general Dra. Diana Salazar, continuará, a las mafias les fastidia que haya gente honesta ……”.
El ‘jerarca’ del partido Social Cristiano que vive en la Isla Mocolí, zona exclusiva de Samborondón, debe ser el Ex Asambleísta por ese partido, Pablo Muentes, implicado en el caso ‘Purga’, o algún otro de esos flamantes millonarios de nuestra Patria.
