Donald Trump ganó las elecciones de Estados Unidos y asumirá el poder en enero de 2025; mientras que en Ecuador, los ciudadanos escogerán a su próximo presidente en febrero.
El pasado 5 de noviembre de 2024, Donald Trump ganó las elecciones de Estados Unidos, con 295 votos de colegios electorales. Su victoria representa un nuevo momento para las relaciones que mantiene el país norteamericano con el mundo, sin embargo, según dijo durante la campaña, su prioridad será la política interna y no las necesidades ni las guerras de otras naciones.
En particular, Ecuador mantiene convenios de cooperación en materia de seguridad y lucha anticorrupción, además, ha sido de interés para los últimos gobiernos, de Lenín Moreno y Guillermo Lasso, conseguir acuerdos comerciales.
Tras el triunfo de Trump, ¿qué se espera de la relación de Ecuador con Estados Unidos?
La línea ideológica de Rafael Correa no era compatible con Estados Unidos. Durante los primeros años, cuestionó las políticas neoliberales de George Bushm, sobre todo por las intervenciones militares en Irak y Afganistán.
Luego, la relación se tensó más cuando Correa decidió retirar la base militar americana en Manta, en 2009; y más tarde, en 2012, cuando asiló al activista político Julian Assange, en ese entonces buscado por la justicia americana.
Sin embargo, aun durante ese gobierno, la cooperación se mantuvo en temas relacionados con el narcotráfico.
Luego, cuando Lenín Moreno llegó a Carondelet coincidió que Trump gobernaba desde la Casa Blanca y la relación bilateral comenzó a tomar fuerza.
De hecho, en ese momento se alcanzaron convenios por la seguridad, educación, lucha contra la corrupción y un primer acuerdo comercial.
En 2021, cuando Guillermo Lasso asumió la presidencia de Ecuador y Joe Biden de Estados Unidos, la cooperación continuó por buen camino, pero con particular énfasis en seguridad y lucha contra el narcotráfico.
Un hito importante de esa relación fue la firma de un acuerdo para ejecutar operaciones marítimas, con militares norteamericanos, que luego se ratificó en el gobierno de Daniel Noboa.
Aunque Lasso no pudo concretar un acuerdo comercial, el Congreso del país del norte aprobó la Ley de Asociación con Ecuador, mediante la cual se estrecharon lazos de cooperación en materia de seguridad y economía.