El 2025 comenzó con sangre en las calles de El Oro. En cinco días, diez personas, todas de sexo masculino, perdieron la vida a causa de hechos violentos en Machala, Santa Rosa y Pasaje.
En Santa Rosa, Vicente Alcívar Aguilar Lasso, de 40 años, se convirtió en la primera víctima de una muerte violenta. Alcívar resultó gravemente herido en una pelea ocurrida entre personas que consumían alcohol. Aunque fue llevado al hospital Santa Teresita, los médicos confirmaron su deceso.
Horas después, en el barrio 19 de Noviembre de Machala, Jean Pierre Vera Cornejo fue asesinado. Cerca de las 14:40 del 1 de enero, mientras caminaba a pocos metros de su hogar, fue interceptado por tres hombres que llegaron en un carro Kia y le dispararon a quemarropa.
Ese mismo día, dos hombres más fueron asesinados en Pasaje. Freddy Abraham Peña Jiménez y Juan Carlos Carchi Chimbo, quienes conversaban en los exteriores de una escuela en la ciudadela 19 de Julio, fueron atacados por un hombre identificado como Gigson M., quien llegó en motocicleta y les disparó sin piedad.
El 2 de enero, la violencia alcanzó a Puerto Bolívar. Un hombre apodado “Colombia” fue asesinado en el barrio Autoridad Portuaria, a pocos metros de la Unidad de Policía Comunitaria. El hecho dejó atónitos a los vecinos por la cercanía del lugar con una instalación policial.
El 3 de enero, Byron Alexander Muñoz Solano, de 33 años, fue último en Pasaje. El ataque ocurrió a plena luz del día mientras un grupo de vecinos realizaba tareas de limpieza en una parada de autobuses. Dos individuos armados irrumpieron en el lugar y dispararon contra Muñoz, sembrando pánico en la comunidad.
La serie de crímenes continuó el 4 de enero en el barrio San Jacinto, sur de Machala. Allí, Stalin Armando Blacio Segarra fue asesinado de varios disparos en la cabeza. En este sector se preparaban eventos para la quema de años viejos, lo que hacía aún más impactante el hecho.
Esa misma noche, Eduardo Alejandro Benítez Nieto, de 23 años, fue atacado en su vivienda en el barrio Voluntad de Dios. Dos hombres armados irrumpieron en el lugar y lo acribillaron en el baño de su casa. Benítez, quien tenía antecedentes penales, murió antes de recibir ayuda médica.
El 5 de enero no fue la excepción. Jaime Vinicio Tamayo Jaramillo, de 47 años, fue asesinado en el barrio San Ramón, al sur de Machala. Tamayo había salido de su casa para responder una llamada telefónica cuando fue emboscado por varios sujetos armados que le dispararon en el rostro, pecho y brazos.
Pasadas las 21:50, otro hecho de sangre ocurrió a Puerto Bolívar. Wilson Iván Solórzano Cun, de 31 años, fue asesinado en el barrio Tiwinza. Su cuerpo fue encontrado por vecinos en un callejón, lo que motivó la activación de un operativo especial de la Policía Nacional debido a la alta peligrosidad del sector.
En cinco días, El Oro registra una preocupante cifra de diez asesinatos, lo que evidencia la creciente inseguridad que vive la provincia. Las autoridades han intensificado los operativos en las zonas más conflictivas, pero los ciudadanos exigen respuestas inmediatas y acciones contundentes frente a esta ola de violencia.
