La Cumbre Banano 2025, que se realizar en Ecuador del 28 al 30 de abril en el Centro de Convenciones de Guayaquil junto a Expoplaza, presentan avances en el manejo integrado del moko en la producción de banano. Uno de los ponentes clave es el especialista en biotecnología agrícola Nilson Oliveira, quien liderará la conferencia ‘Estrategias Biológicas para el Control del Moko en el Banano’.
Oliveira, ingeniero agrónomo brasileño, tiene más de una década de experiencia en el diseño e implementación de soluciones basadas en microorganismos benéficos y manejo agroecológico. Su enfoque ha permitido mejorar la salud del suelo y reducir el uso de agroquímicos en cultivos tropicales.
La producción de banano en Ecuador y América Latina enfrenta una grave amenaza: el moko del banano (Ralstonia solanacearum raza 2), una de las enfermedades bacterianas más destructivas para los cultivos de musáceas. Su rápida propagación a través del suelo, el agua y herramientas contaminadas ha generado pérdidas millonarias en la industria, afectando la calidad del fruto y reduciendo drásticamente los rendimientos.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el moko del banano puede disminuir la producción hasta en un 80% si no se implementan estrategias de manejo efectivas. Esta bacteria penetra el sistema vascular de la planta, bloqueando el transporte de agua y nutrientes, lo que provoca su marchitamiento y muerte. Debido a su persistencia en el suelo, los terrenos infectados pueden perder su capacidad productiva por años, agravando la crisis del sector.
Ante este panorama, expertos han desarrollado nuevas estrategias sostenibles para mitigar el impacto del moko y evitar la expansión de la bacteria. Estas incluyen:
- Control biológico: Uso de microorganismos benéficos que inhiben el crecimiento de Ralstonia solanacearum.
- Microbiología del suelo: Implementación de bioinoculantes que fortalecen las defensas naturales de la planta.
- Bioprocesos sostenibles: Métodos de producción agroecológica para reducir la dependencia de agroquímicos.
- Monitoreo y prevención: Estrategias para la detección temprana y el aislamiento de plantas infectadas.
“El moko es una amenaza latente para la industria, pero con un enfoque integrado y el uso de tecnologías microbiológicas, podemos reducir su impacto y avanzar hacia una producción más resiliente y sostenible”, destacó Oliveira.
La Cumbre Banano 2025 reunirá a expertos, productores, investigadores y empresas del sector en un evento que incluirá conferencias, una feria comercial y espacios de networking, consolidándose como un punto de referencia clave para enfrentar los desafíos fitosanitarios del banano.
