Los candidatos a la Asamblea Nacional en su gran mayoría mantienen políticas huérfanas por el poco o nada de conocimiento del concepto de la Ley en torno a los ofrecimientos que están realizando para captar el voto. Es una tristeza escucharlos por cuanto la Ley Orgánica Parlamentaria tiene sus prohibiciones, tan solo pueden legislar y fiscalizar.
Señores candidatos, lo primero que deben hacer y prometer es no mentirle al pueblo soberano, piense y propongan lo que sí pueden cumplir, como es, crear una Ley para capacitar a todos los ciudadanos para que conozcan los problemas del país, potencializando la auto estima y las obligaciones del ciudadano.
En segundo lugar, comprometerse a organizar veedurías locales con participación ciudadana con la Secretaría Nacional Anticorrupción, para la observación del cumplimiento de funciones judiciales, leyes, reformas educativas, servicios públicos, administración pública en todas las instituciones autónomas y descentralizadas.
Tercero, comprométanse con la comunidad ecuatoriana que presentarán leyes levantando el sigilo bancario, para la revisión de cuentas y patrimonios de los asambleístas, además, de ciudadanos que hayan cumplido funciones públicas, en el que se incluyan a policías y militares para determinar el enriquecimiento ilícito y la restitución al Estado de valores y bienes no justificados.
Que en todas las instituciones púbicas los funcionarios públicos percibirán sueldos menores a los del presidente de la República por mandato Constitucional, derogándose los latisueldos dorados de las organizaciones sindicales como el caso de Petroecuador y otros, deben desaparecer.
Otro de los temas de mayor importancia para la gobernabilidad del país es el de reformar la Ley Orgánica Parlamentaria (Asamblea Nacional) sancionado a los que se cambian de camiseta, haciendo que se respete la ética parlamentaria.
Vivimos pobres por los corruptos y ladrones que se han llevado en peso los fondos públicos y hoy se hacen llamar perseguidos políticos.
Señores candidatos, presenten reformas de leyes para capacitar a los servidores públicos para que asimilen los conceptos de calidad y beneficio, y se implementen sistemas de gestión de calidad de servicio en las instituciones públicas. Que el “castillo” de la burocracia dorada desaparezca para siempre.
Establecer como política de Estado para las instituciones públicas la dignidad y la calidad paras el cumplimiento de un plan estratégico flexible para el cumplimiento de objetivos.
Que las universidades del país abran las puertas a los bachilleres y continúen sus carreras universitarias en las carreras que ellos eligen y no se les imponga carreras.
Que se priorice la evaluación a los GAD del país, capacitándolos en sus deficiencias. Conocer la razón porque no se les paga a los trabajadores que les adeuda más de tres meses.
Estas últimas reformas citadas permitirán un ahorro en ciertos establecimientos públicos, y más que todo, controlar los fondos del Estado ecuatoriano y salir del sistema de deficiencia.
Señores candidatos, las elecciones deben ser unipersonales y las papeletas de votación deben contener las fotos y nombres de los candidatos de manera horizontal. Evitando el voto en plancha.