El inicio de la Revisión Técnica Vehicular (RTV) 2025 marca un momento necesario para la seguridad vial en el país. Este proceso no es solo una obligación legal, sino un compromiso social con la vida de miles de personas que diariamente transitan por nuestras calles y carreteras. La RTV debe ser vista como una herramienta indispensable para prevenir siniestros y garantizar un transporte más seguro para conductores, pasajeros y peatones.
Según datos recientes, los accidentes de tránsito siguen siendo una de las principales causas de mortalidad en el país. Muchos de estos siniestros están relacionados con fallas mecánicas que podrían haberse evitado mediante un mantenimiento adecuado. Frenos desgastados, neumáticos en mal estado, sistemas de luces deficientes, entre otros, son problemas detectables en una revisión técnica vehicular. Realizar este procedimiento a tiempo permite corregir fallas críticas y, en consecuencia, reduce significativamente el riesgo de accidentes.
Además, el estado de los vehículos no solo afecta a sus ocupantes, sino también a los peatones y otros conductores. Un auto que no cumple con los estándares de seguridad representa un peligro latente en las vías. Por ello, la RTV debe asumirse como una responsabilidad colectiva, donde cada ciudadano contribuye a crear un entorno más seguro para todos.
Los pasajeros, especialmente aquellos más vulnerables como niños y personas mayores, confían plenamente en la seguridad del vehículo que los transporta. Un automóvil en óptimas condiciones asegura que cada viaje sea una experiencia libre de preocupaciones innecesarias. Realizar la RTV no solo es una muestra de responsabilidad hacia la sociedad, sino también de amor y cuidado hacia nuestros seres queridos.
En este sentido, es vital destacar que la seguridad vial no depende únicamente de las autoridades de tránsito, sino de la voluntad de cada propietario de vehículo para garantizar el mantenimiento adecuado de su unidad. La revisión técnica no es un gasto, sino una inversión en tranquilidad y protección para todos los ocupantes.
La Revisión Técnica Vehicular 2025 no debe ser vista como una imposición, sino como un acto de responsabilidad ciudadana que protege vidas y promueve un entorno más seguro y sostenible.